Tomás, un chico de 10 años, sufrió una doble fractura de cráneo luego de que se le cayera un tirante de una carpa del balneario Punta Ignacio, en San Clemente del Tuyú, donde pasaba sus vacaciones en familia.

El hecho, uno más en un verano accidentado, ocurrió el pasado domingo por la mañana y Tomás, quien ya se encuentra en su casa en Buenos Aires, pasó las siguientes 48 horas internado. Primero fue trasladado por su padre al Hospital de San Clemente, pero por la gravedad de la lesión fue derivado al de Mar de Ajó.

Según contó su madre, Gloria Romero, en TN, la familia llegó al balneario de Costanera y calle 32, junto al muelle, antes de las 11 de la mañana del domingo y alquilaron la carpa N° 15. Al llegar, el tirante que sostiene el toldo de la carpa estaba en el piso y les pidieron a dos empleados del lugar que lo colocaran en su lugar. Poco tiempo después, un viento lo tiró y cayó sobre la cabeza de Tomás, que estaba en la carpa junto a su hermana de 8 años.

Inmediatamente, los padres pidieron hielo en el balneario y decidieron llevarlo por su cuenta al hospital. “Del balneario en ningún momento nos ofrecieron nada. Lo llevamos nosotros mismos [al hospital] para no perder tiempo. Le hicieron una radiografía en la que se veía una fisura en el cráneo. Entonces decidieron hacerle una tomografía y ahí confirmaron la fractura”, precisó.

Al chico le esperan controles periódicos durante una recuperación de dos meses hasta que el hueso suelde por completo. Su madre denuncia que la carpa estaba visiblemente en mal estado y que en el balneario no se hicieron cargo de lo ocurrido.